En la Ruta Motera (no motera) del Silencio, no hay cronómetros ni metas impuestas, sólo la libertad de rodar a tu ritmo, en compañía de mujeres que, como tú, han decidido que es hora de divertirse, aceptando las cosas como son, sin luchar, y dejando las expectativas y las exigencias atrás.
Durante 5 días recorreremos las carreteras secundarias de Cuenca sin prisas, disfrutando de los paisajes, y con un claro objetivo: que nuestras risas suenen más fuerte que el ruido de nuestras motos.
¿Y si te dijera que no necesitas ser una experta en algo para disfrutarlo a tope?
No tienes que ser una pro de las motos, ni conocer todas las marcas y modelos.
Aquí, la moto es solo el medio para llevarte hacia algo mucho más grande:
Disfrutar del camino acompañada por otras mujeres como tú.
Porque lo importante aquí no es la cilindrada, ni los caballos de tu “bicha”, lo importante eres tú, y durante la Ruta Motera (no motera) del Silencio lo vamos a recordar juntas.
¡Para que no se nos olvide nunca!